Durante las décadas de los 80 y 90 se produjo el proceso de descentralización sanitaria con el traspaso a las Comunidades Autónomas de las competencias en materia de sanidad y que ha sido el mayor cambio experimentado de la sanidad española tras aprobar la Constitución Española en el año 1978. El mundo sanitario de las Comunidades Autónomas se ha convertido de forma mayoritaria en espacios acotados para la capitalización política partidista y propiedad de los políticos autonómicos, que pueden manejarlo en ventaja propia.
La cesión de las competencias sanitarias a las Comunidades Autónomas se convierte en algo positivo cuando las Autonomías llevan la asistencia sanitaria de un modo más eficaz y más próximo a los ciudadanos, pero cuando estos mismos gobiernos autonómicos dependen de unos señores que quieren convertir la sanidad en un negocio, se crea el caos…
Me parece un grave error que el Ministerio de Sanidad tenga cada vez menos competencias y que quede diluido, porque el sistema sanitario público coordinado es mucho más fuerte con el apoyo del Estado.
El desmantelamiento de la SANIDAD PÚBLICA, para que se beneficie la privada, constituye una de las principales preocupaciones de la ciudadanía, en el que las desigualdades no siempre son justificadas.
No puede haber salud pública sin incorporar de manera representativa a la ciudadanía.
La burocratización ha hecho lenta y pesada la gestión en un servicio como el sanitario en el que las exigencias de los ciudadanos y pacientes no admiten un funcionamiento insensible a sus necesidades y preferencias…
Cuando se destroza lo público, miles de personas lo pagan con su vida.
Lo que ha hecho Moreno Bonilla no tiene perdón y tiene que tener consecuencias. Andalucía admite que 2000 personas han sufrido los retrasos en el diagnóstico de cáncer de mama. El cáncer no espera y algunas mujeres ya no están… , estas son las consecuencias de destrozar la SANIDAD PÚBLICA y de colapsarla en beneficio de la PRIVADA.